Escabulliendme a la playa

Perseguí a urahara todo lo rápido que pude hasta llegar a la playa.

*¿Le habré perdido?*

-Qué mal encima me he ido sin decir nada... deben pensar cualquier cosa de mi - me tapé la cara con las manos.

Miré al frente y me acerqué a la orilla. Casi al instante vi a urahara sentado en la arena asi que como pude me acerqué a él. Siempre me olvidaba de las botas.

-¿Por qué has salido corriendo? - dije tirándome a su lado con expresión de niña pequeña

-Pues clarto que soy yo tonto... - dije levantandome como podía y sacudiendo una bota. Me sonrojé un poco ante su pregunta, la verdad es que lo había perseguido por un impulso -. Yo etto... ¿p-porqué te fuiste? Estaba preocupada...

Me senté de golpe en el suelo, ahora tenía que pensar que estaba loca

Miré a urahara. Lo cierto es que parecía alguien gracioso, y el chico de antes parecía alguien algo callado o tranquilo... no sabría decir por qué se llevaban mal pero al ver como dejaba la frase en el aire decidí no preguntar mas.

-Ah bueno... -sonreí con fuerza - ¿Y que tal tu estancia por aquí? ¿Te gusta el sitio? ¿Y la gente?

Me tapé la boca de golpe, estaba hablando demasiado por los nervios y me puse un poco colorada

-Gomen...

-Me alegro...

Al ver que no me hacía mucho caso me coloqué mirando al mar en silencio

Ví como me miraba y me sobresalté un poco, la verdad es que hasta ahora no se había mirado así, y llevabamos un rato largo juntos.

-B-bueno... lo cierto es que acabo de llegar de un viaje de trabajo y ... - miré al cielo en busca del sol encontrandome sólo con la luna -. ¡¡KYA!! ¡¡Es tardísimo!! Gomen nasae, debo irme corriendo.... ¡bolita!

Salí corriendo a paso forzado por la arena y me despedí con la mano de urahara

-¡Ya nos veremos!