Hogar... (¿?) [Shizu, Lucy, Kazu]

Disfrutaba de sus caricias mientras seguía sus besos tratando de darle toda la pasión y la lujuria que quería hasta que separó su beso.

Su voz sonaba entrecortada lo que la hizo sonreír con malicia. Pasó los brazos por su hombros para así rodearle el cuello en un abrazo bastante cercano y juntó su frente con la de él

-¿Nada de nada...? - preguntó con cierto tono infantil.

Juntó sus labios con los suyos en un beso leve, sin dejar de mirarle a los ojos de forma curiosa, con un brillo de picardía en ellos.

Cerró los ojos por un instante mientras volvía a llevar sus labios a su oido

-¿Y si te lo doy yo...? - murmuró

Se mordió el labio aunque no estaba segura de que fuera capaz de verlo y acercó sus manos hacia su camisa tirando de él hacia ella para quedar juntos.

Su boca de posó en su nuez para deslizar sus labios por su cuello llegando hasta su clavícula, echando bao lentamente tratando de hacerle sentir algún escalofrío.

Su tartamudeo la hacía sonreír mas cuando sacó la lengua para lamerle pudo notar la boca de Kazu en su cuello. Un escalofrío subió por su columna haciendo que se le erizara la piel y se encogiera un poco de hombros

-Nee... Eres malo... - murmuró con voz infantil

A pesar de su voz, sus labios mostraban una sonrisa de entusiasmo y diversión.

Sonrió levemente al verle enfadarse, mas su siguiente respuesta la tomó por sorpresa. Le miró abriendo levemente la boca cuando cogió sus manos y al notar que empezaba a lamerla volvió a erizarse

-¡¡P-para!! - le gritó

Infló las mejillas para no seguir gritando, y dejar de parecer desesperada, sin embago empezó a hacer fuerza por separarse de él intentando huir

Al abrazarla pegándola a él se puso más nerviosa. Llevó sus manos hasta su pecho tratando de zafarse de él, mientras le llenaba la cara de babas. Todo, sin éxito. Estaba demasiado alterada.

-¡¡Para!! - volvió a gritarle

Infló las mejillas tratando de serenarse pero sin grandes ideas hizo lo único que se le ocurrió. Movió su pierna derecha hacia atrás para coger impulso dándole un rodillazo en sus partes nobles

-¡¡Te he dicho que me sueltes!! - volvió a repetir algo ruborizada ya que no acostumbraba a perder los nervios así

En el momento en que la soltó se cruzó de brazos para mirar a otro lado en una pose indiferente, mas sus ojos se iban siempre a ver a Kazu.

Se había desplomado delante de ella, sin poder articular palabra y cuando escuchó parte de su nombre la recorrió un escalofrío. Se ruborizó por completo suspirando con fuerza.

Lentamente se agachó delante de Kazu tratando de no mirarle a los ojos mientras le acariciaba las mejillas apartando las lágrimas

-Te dije que me soltaras... - dijo inflando las mejillas

Alzó la vista para verle la cara bastante apenada

-Gomen... Creo que me he pasado....

No se le ocurrió otra cosa que abrazarle levemente

Al ver que se revolvía le soltó mirándole algo apenada. Sin embargo, no encontraba nada que pudiera hacer. Se levantó de nuevo sin mirarle

-Yo te lo advertí...

Sin decir más se dio la vuelta y se metió en la habitación cerrando la puerta tras de sí y acercándose a la ventana. Apoyó ambas manos en ella y observó el exterior algo enfurruñada

*Tú no has tenido la culpa... Le avisaste después de todo... Entonces....¿Por qué te sientes tan mal...?* -pensó suspirando con la mirada perdida

Suspiró antes de volver a centrar su mirada en lo que realmente había en la ventada, o sea, nada, por lo que decidió volver a salir, por lo menos para ver como estaba. Al abrir la puerta de topó de bruces con él, echo un ovillo.

No dijo nada, se acercó a él y se colocó a su lado mientras le acariciaba el pelo de forma tranquila, sin apenas mirarle

Elevó la cabeza volviendo a suspirar sin saber muy bien que decir. No dejó de acariciarle el pelo ya que él no la había vuelto a rechazar como antes al menos...

Sonrió levemente recordando su actuación de antes, de verdad había tenido poco aguante...

-¿Te encuentras mejor...? - murmuró con voz triste y profunda.

Al terminar de hablar se atrevió a volver a mirarle algo avergonzada

Al ver que se reincorporaba dejó de tocarle la cabeza para juntar sus manos jugueteando nerviosa con sus dedos. Apenas le miraba con el rabillo del ojo ya que de verdad se sentía avergonzada

-Gomen... - murmuró

Bajó la cabeza dejando quietas sus manos

El momento en que cogió sus manos la tomó totalmente por sorpresa. Levantó la vista para mirarle con los ojos brillantes. Asintió a su trato con una leve sonrisa hasta que vio que la suya desaparecía.

-De verdad que lo siento...

Le abrazó tratando que se acurrucara en su pecho, mientras seguía esperando a que se recompusiera.

-No estoy acostumbrada a ponerme tan nerviosa... - dijo avergonzada - Aunque no es excusa... no quería hacerte daño...

Cuando mencionó las cosquillas se quedó tiesa durante un instante. ¿Por qué tendría tantas cosquillas?

-Buuh... Está bien...

Suspiró y comenzó a acariciar su cabello lentamente. La verdad es que a pesar de los momentos anteriores, la escena empezaba a hacerse bastante enternecedora lo que hizo que se sonrojara ligeramente. Se quedó callada por un instante hasta que no pudo contenerse más

-Te quiero...

Al escuchar sus acusaciones abrió un poco la boca para después volver a bajar la vista apenada.

*De verdad me odia...*

Dejó de acariciarle el pelo mientras mirada hacia otro lado con un leve sonrojo y una expresión seria

-Kazu-kun... ¿De verdad crees que debería estar contigo...?