Apartamento de Alice

Terminé de servirlo todo y me dirigí a la terraza, donde solíamos comer. Ahí me senté, esperando a que él llevase las cosas. La terraza de mi séptimo piso ofrecía una vista preciosa de toda la ciudad.

Coji todas las cosas y las lleve a donde se encontraba ella las puse encima de la mesa y me sente a cenar

-Mmm, tiene todo tan buena pinta!

-Pues... que aproveche-sonreí, empezando a cortar la carne. Intenté recapitular mientras masticaba cómo había acabado invitando a un tipo que conocía de apenas unas horas a invitar a mi casa. Eso era propio de mi hermano, no de mí. ¿Era posible que aquella nueva ciudad me estuviese cambiando?

Comi lentamente aprovechando las vistas!

-Mucha sgracias por invitarme, no se como me puedes aguaNtar si soy un muermo

Me reí.
-¿Un muermo? A mí me resultas bastante interesante...-demonios, no debería haber dicho eso. Aunque claro, si me podía leer la mente daba igual...

-Tranquila, no ocultes tus pensamientos, no te servira de nada jajajaj^^

Ya habia terminado asi que esperaba a que termianba ella

Me apresuré en terminar mi comida, para no hacerle esperar.
-¿Te ha gustado?

-Si muchisimas gracias

Me levante y recoji mis platos y los suyos y los lleve a la cocina

-Oye te apetece un par de chupitos?

Me encogí de hombros.
-Sorpréndeme...

Empeze a mezclar todas las botellas a cantidades iguales en dos basos de chupitos y sali al balcon poniendoselo delante

-Aver que te parece

Lo probé. Era bastante fuerte, pero estaba muy bueno.
-Mmh... ¿qué es?

Lo tome de un sorbo

-No se es una mezcla de todo lo que tenias

Me reí. Aquello seguramente era una bomba para el hígado, pero daba igual.
-¿Me sirves un poco más?-notaba el rubor de mis mejillas. Aquella cosa, fuera lo que fuese, empezaba a hacer efecto.

Volvi a entrar y hize el mismo proceso se lo di y me volvi a sentar

-A tu salud jajja

Me lo tome d eun golpe

Yo no iba a ser menos, y también me tomé el chupito de una sentada.
-Creo que te voy a invitar a cenar más a menudo...-el alcohol hacía efecto, y la familiaridad excesiva se hacía notar. Una pequeña voz en mi cabeza susurró que no bebiese más, pero pronto fue acallada.

-Quieres mas?

Me levante mientras lo decia

-Sí-sonreí, encantada.-Oye, ¿te apetece que hagamos algo? Ver una película, o jugar a algo...

-Lo que tu quieras, por mi no hay problema

Fui a hacer lo mismo de antes y volvi con los dos basitos y lo puse en la mesa

Me lo bebí de un trago alegremente, y luego me agaché para ver qué había en uno de los armarios. Saqué una baraja francesa.
-Podemos jugar a las cartas...

-A las cartas.... por favor... eso es para viejos...!

Propondria algun juego mas atrevido como puede ser El strip-poker

Me reí. Qué risa más estúpida. Era buena jugadora de póker, aunque nunca había jugado ebria. Y por algún motivo que aún me pregunto, acepté.
-¡Valee!-y encima lo dije con una enorme sonrisa.

-Mejor pongamonos dentro...

Entre y me sente en el sofa a esperar su llegada

Me senté frente a él, barajando las cartas con cierta torpeza. Repatí las cartas y comenzamos a jugar.

Jugamos varias partidas, yo gane 3 y ella 1

-Esto se pone interesante!

Ya me había tenido que deshacer de los calcetines, la chaqueta y -muy a mi pesar- la camiseta. Él sólo se había quitado la capa, y aquello empezaba a ser más una cuestión de orgullo que otra cosa. Me consideraba una buena jugadora de póker, y no me gustaba perder.

Siguiente partida. Un full de reyes y jotas, no podía perder. Henchida de orgullo, mostré mis cartas y... ¡¿Póker de damas?! Increíble. Me levanté para quitarme los vaqueros, gruñendo.
-No puede ser que tengas tanta suerte...